Zidane se movía con la gracilidad de un bailarín. Cada gesto suyo era pura maestría y sofisticación técnica, él orquestaba el juego con pasión desbordante. Sus pases eran milimétricos, como pinceladas https://lewyscrfn357101.blogstival.com/60033609/el-cabezazo-de-zidane-y-su-significado